Toda obra ha iniciado con un sueño.
Pero toda obra no se ha construido en base a solo el desear dicho sueño, sino a la acción que se puso en marcha para hacerlo realidad..
Todo resultado exitoso es una acción constante en alcanzar metas definidas. Saber qué quiero, cómo lo quiero, cuando lo quiero y que voy a hacer para tenerlo.
Los deseos y metas son posibilidades de realización y dependen de nosotros. No basta con tener sueños y deseos, hay que tomar la firme determinación de cristalizarlos, luchar por hacerlos realidad. Para ello debemos de estar convencidos y preparados para anotar en papel los cambios que queremos en nuestra vida, aquello que queremos alcanzar, con lo que tanto soñamos pero que poco enfrentamos para hacerlo realidad.
Los más grandes líderes y mentores reconocidos a nivel global hablan de 4 objetivos o prioridades básicos para alcanzar el éxito y transformar nuestra vida.
1) Tener un sueño claro, definido, específico y alcanzable.
2) Establecer las metas a alcanzar para que ese sueño se convierta en realidad.
3) Crear y desarrollar un plan de acción, concreto y motivador.
4) Poner un esfuerzo constante en hacer trabajar el plan de acción.
Es de vital importancia anotar prioridades, retos, obstáculos a vencer, fechas de inicio y finalización al establecer nuestras metas.
Si nos guiamos por estos 4 objetivos o prioridades, todo aquello que soñemos puede hacerse realidad si trabajamos en ello.
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