La actitud del hombre o mujer puede ser negativa o positiva y, dependiendo de la actitud que tome, él o ella serán los únicos responsables de todo aquello que con su actitud le suceda, de su éxito o fracaso.
Tomar una actitud positiva es la fórmula mágica para tener una mente de triunfador, es acrecentar la fe en saber que todo lo que nos proponemos lo podemos lograr, es obtener de ella una fuerte motivación hacia la acción, nos mueve a ser hacedores, responsables e independientes.
Si observas los resultados de tu vida: de un año, un mes, un día. Te darás cuenta de que toda acción que emprendiste estuvo precedida por tu actitud frente a cada situación, y también es cierto que tú poseías el absoluto dominio sobre cada acción que emprendiste, que la acción solo fue la resultante de tus pensamientos y tus emociones.
El ser humano es un ser creador. Es creador de ideas, es decir, de pensamientos expresados en conceptos, palabras e imágenes, eso es lo primero que hacemos al llegar a la acción. Todo de alguna manera ha sido modificado o creado por el hombre y, antes de salir al mundo primero fue concebida por la mente del hombre.
Nuestra vida de hoy y de mañana depende de las acciones que tomamos, y todo resultado no es más que el producto directo de nuestra actitud dominante.
Debemos de tomar una actitud positiva diaria y continua frente a la vida, èsta debe de ser nuestra elección. La elección es nuestra voluntad. Y la voluntad es libre.
No hay comentarios:
Publicar un comentario